“No tengo miedo, vine a enseñarlos a leer y escribir”
Sentada en el sofá de la amplia sala de su casa, la Licenciada Mirtha Jiménez Estable, recuerda emocionada aquel año, en que por campos y ciudades, jóvenes, algunos casi niños, llevaron la luz de la enseñanza a miles de personas olvidadas en la isla. Les proponemos escuchar el testimonio ofrecido por esta alfabetizadora