Un hombre de alma cristalina
Sobre José Martí, el revolucionario y periodista cubano Enrique Collazo expresó: "Era pequeño de cuerpo, delgado; tenía en su ser encarnado el movimiento; grande y vario su talento, fino por temperamento, luchador inteligente, hombre amable, cariñoso, dispuesto siempre a sufrir por los demás; apoyo del débil, maestro del ignorante, protector y padre cariñoso de los que sufrían; aristócrata por sus gustos, hábitos y costumbres. Era muy nervioso, un hombre ardilla; quería andar tan de prisa como su pensamiento, lo que no era posible”. En sus declaraciones, el Doctor en Ciencias Históricas Pedro Pablo Rodríguez López, Premio Nacional de Ciencias Sociales y Humanísticas, dosmil9 y Premio Nacional de Historia dosmil10, certifica la afirmación de Enrique Collazo.