El crimen no pudo mutilar la esperanza de los cubanos
Más de 300 mil cubanos emprendieron en el año 1961 una gran cruzada para eliminar el analfabetismo presente en más de la mitad de la población del país. Ante el llamado del líder de la incipiente revolución cubana Fidel Castro, el joven de 19 años Conrado Benítez García marchó a la zona del Escambray, lugar donde la pobreza y el oscurantismo heredados de la dictadura requerían profundos cambios.