Bartolo: Si mañana hace falta luchar, cuenten conmigo.
Su alegría contagiosa es más que su carta de presentación. Es el sentimiento que le insufla salud a su alma de casi 90 años donde se refugian interesantes historias de las que vive orgulloso. Justo Rebollido López, combatiente de la clandestinidad en Cienfuegos cuenta sus hazañas revolucionarias.